Orientaciones Pedagogicas para la Planificación Didactica en el Nivel Inicial
La Educación se ha reafirmado, como un agente activo de la sociedad, constituye un instrumento indispensable para que la humanidad pueda progresar hacia los ideales de paz, libertad y justicia social. Sobre estas consideraciones, se hace necesario que el docente y en especial el de Educación Inicial reflexione sobre los cambios que emergen en el campo educativo, teniendo presente que en función de las corrientes constructivistas y humanistas del conocimiento hemos pasado de una educación centrada en la enseñanza Una educación centrada en el desarrollo. El docente de este siglo está llamado a construir la sociedad del conocimiento, a comprender que los sistemas educativos regidos centrados en el docente han desaparecido para dar paso a los sistemas educativos flexibles y dinámicos cuyo propósito es contribuir al desarrollo integral del niño y la niña.
Tomando en consideración que la Educación Inicial tiene como propósito la contribución del aprendizaje y el desarrollo integral del niño, desde su gestación hasta los 6 años o su ingreso a la Educación Básica, como sujetos de derechos y garantías, en función de sus intereses, sus potencialidades y el contexto social y cultural en el cual se desenvuelven, se hace necesario que el o la reflexión docente sobre su praxis diaria, pues a él / ella se le otorga un protagonismo preponderante en la calidad de la enseñanza, por lo tanto debe consideró las exigencias de la sociedad y hacer más énfasis en sus roles de mediador, planificador, evaluador, innovador, de orientador de investigador Soriano (2005), contemplando que ninguno de estos procesos tienen esencia por si solo, la esencia se la da el docente, cuando responsablemente hace uso de ellos.
Por lo tanto es imprescindible cambiar ese tipo de enseñanza, memorística, verbalista, transmisión de datos fragmentados e informaciones puntuales que llevan a una comprensión de la ciencia descontextualizada del mundo cotidiano y de las necesidades de la vida social.
Asumiendo así el compromiso de preparar a los educandos para los nuevos tiempos promoviendo en los niños el aprender a conocer, hacer, ya convivir con otros, y finalmente, aprender a ser, pilares en los que se centra el desarrollo de la persona y de la sociedad Delors 1996.